jueves, diciembre 15

Quebrada...

Prometo no volver a hablar, prometo no volver a ser quien soy, prometo esconder mis errores en un velo de sonrisas, prometo no ser débil, prometo ser quien quieres que sea, prometo no volver a decepcionarte, ni dejarte en ridículo...
Ahora estoy muda, estoy ciega, estoy tirada en medio del desierto, árido y sin esperanzas de vivir un día más.
Traté de ser perfecta para ti, traté de ser como los ángeles que veías de niña en esos espectaculares desfiles de modas, cuando creías que podías ser así, cuando alguien alguna vez te dijo que eras hermosa; traté de ser perfecta como los modelos imaginarios que bailaban en tus sueños mientras buscabas a la novia perfecta, esa que siempre quisiste que fuera
Esa que no es ALTANERA ni REBELDE si no sumisa y tierna. La que siempre te haga ver bien frente a tus amigos, la que nunca dice nada

Esa muñequita de porcelana, que solo se ve bonita frente a la sociedad, que solo te demuestra amor incondicional, y que no tiene opinión propia. La que no se mete en tus planes, la que solo cumple lo que le pides, y mira a tu lado cuando se te cae, pero no dice nada, no dirá nada hasta que todos se hallan ido, es hasta entonces que te consolará para que nadie note que necesitas de su ayuda, para que todos vean lo fuerte que eres.
Y ni hablar de retarte.

Ella solo estará ahí esperando a que tu la llames, cuando desees que te acompañe, y cuando quieras salir con tus amigos, divertirte, conocer mujeres; también estará esperándote a que regreses, solo esperándote, con los ojos cerrados, para no ver quien eres realmente y seguir recordando a quien fingías ser.
Se que dirás: "yo no quiero que cambies!", pero ya no me creo eso.


Te decepcioné desde que no fui el ángel que soñaste, y eso que MORÍA por ser uno...



Y ya ni hablar de solo hablar.
Gatita en el limbo, Besitos insensibles.